El diente de león ofrece un gran abanico de beneficios para la salud. En este artículo trataremos qué es el diente de león y para qué sirve. También veremos cómo preparar una infusión de diente de león correctamente, ya que cada parte de la planta sirve para algo distinto. La raíz de diente de león es la usada a modo medicinal a día de hoy.
El diente de león es una planta medicinal que se puede encontrar como hierba para infusionar y es una de las más valoradas. También es conocido como achicoria amarga. Como podemos ver en la foto, es una planta fácilmente identificable por sus flores amarillas redondeadas con pétalos.
La planta de diente de león en sí es muy conocida por sus usos medicinales y sus grandes beneficios para la salud como los que vamos a ver en este post. Además, su empleo ha sido aprobado por la Agencia Europea del Medicamento, es decir la EMA. Ha aprobado el uso tradicional de la hoja y la raíz como diurético para conseguir una mejor eliminación urinaria, entre otros muchos beneficios, como pueden ser mejorar la piel, ayudar a riñones e hígado y ayudar a adelgazar.
El diente de león como bien se dijo, se ha usado durante siglos como recurso medicinal, es decir, como tratamiento para diversas afecciones, enfermedades y condiciones físicas. Esto se debe a sus diferentes y potenciales propiedades que permiten su uso para mejorar la salud. Propiedades nutritivas, digestivas, coleréticas, protectoras hepáticas y diuréticas.
Estas dos funciones van de la mano porque al tratarse de un excelente diurético, aumenta la producción de orina y por tanto combate muy bien la retención de líquidos. Son las hojas, la parte de esta planta, las que poseen propiedades diuréticas que aportan potasio y vitamina A junto con otros nutrientes.
Estamos hablando entonces de una hierba comestible con un elevado porcentaje de agua y un reducido porcentaje de carbohidratos y grasas que, debido a sus efectos diuréticos, también consigue eliminar el agua y toxinas como ya comentamos que a su vez facilitan adelgazar más fácilmente. Si tu principal objetivo es adelgazar, puedes encontrar más ideas que te pueden servir en nuestro post sobre las mejores hierbas e infusiones para adelgazar.
La planta del diente de león es muy rica en ácido fólico, vitamina C y betacaroteno, sustancias bioactivas naturales, que ayudan a prevenir formación de muchas enfermedades gracias a sus propiedades hipocolesterolemias y antioxidantes, o simplemente ayudar a reducir el envejecimiento prematuro.
Hay investigaciones sobre el diente de león que ya afirman que esta planta es capaz de ayudar a evitar el daño oxidativo de las células y a reducir parte del colesterol (el colesterol malo) que ayudan a su vez a reducir posibilidades de problemas cardiovasculares y cerebrovasculares.
Como bien ya dijimos, esta planta es rica en betacaroteno y vitaminas, muchos nutrientes que también encontramos en verduras y frutas. Estos nutrientes sean de manera utópica o externa, ayudan a mantener mucosas, visión y piel en muy buen estado. Un remedio muy bueno contra aquellas impurezas de la piel.
Tiene efectos como reducción de inflamación, cicatrización de heridas o quemaduras, combate la foto envejecimiento y también combate infecciones de la piel como acné o eccemas, algo cada vez más padecido por la gente y una preocupación constante.
Hay componentes en esta planta muy poderosos como son los polifenoles, flavonoides, polisacáridos y propiedades coleréticas. Estas suponen un efecto protector y depurativo en el hígado, uno de los órganos más importantes, encargado de purificar y mantener la sangre en buen estado. Las propiedades estimulan la secreción de bilis para evitar problemas comunes como piedras y ayudando a la regeneración del hígado.
El diente de león se puede consumir de muchas maneras, pero la más fácil de preparar es con una buena infusión. Ahora bien, su preparación, es importante realizarla teniendo en cuenta que:
Esta planta es muy beneficiosa, demasiado, así que estarás preguntado si hay una parte mala. La respuesta es que no es peligrosa si se toma bajo control y con cabeza. La inocuidad del diente de león no ha sido demostrada por lo que es mejor evitar esta planta durante el embarazo.
Otros casos en los que no es conveniente ingerir o tomarla es en personas con problemas de obesidad o hipertensión, así como personas con úlcera digestiva o problemas de acidez estomacal. Por todo esto, es recomendable consultarlo con un especialista para valorar cada caso concreto, que como bien sabemos, cada persona es un mundo, y lo que va bien para unos puede ir mal para otros.
Un consejo es que no abuses de dos tazas diarias. Por ejemplo, te tomas una infusión por la mañana o a mediodía y otra por la noche. Incluso una, también sería suficiente.